Ginebra británica pero claramente influenciada por la cultura japonesa. Todo fue idea de la bartender escocesa Dee Davies, que se apasionó por el país del sol naciente y quiso mostrar todo su cariño por él creando una ginebra de corte clásico pero que tuviera esencia de Japón. Davies tuvo la oportunidad de desarrollar la bebida después de ganar la competición de Diageo ‘Show Your Spirit’ en 2013. La experta quiso experimentar con los sabores y añadió a la ginebra flor de cerezo y yuzu, la fruta cítrica nipona. Para rematar le dió un toque de sake para que fuera más cremosa, distintiva, original y sensacional. El resultado es increíble y merece mucho la pena ser conocido.Cada botella cuenta con la firma de Dee Davies y un tapón de madera artesanal confeccionado por artistas británicos con cerezo japonés y rematado por un pájaro, el mejiro japonés, tan importante en la cultura de este país oriental. La forma de la botella homenajea al estilo tradicional de las vasijas de ginebra británicas con el cuello de las botellas de sake. La etiqueta es elegante a la par que curiosa con ese mejiro japonés sosteniendo un paraguas abierto (unión de ambas culturas) y un ramillete de cerezo en flor.